Esta semana estuve con mi madre y mi hermana en Requena y compré embutido del que tienen en la zona en una carnicería fantástica que hay en el mercado (en general toda la villa tiene un embutido maravilloso).
Antes mi madre lo hacia en casa y nos lo traía ya frito y en orzas que era una delicia.
Ahora ya está un poquito mayor y lo compramos en un sitio de confianza que también sale muy bueno.
Puede parecer una tontería, pero yo no lo había frito nunca para guardar en aceite, así que le pregunte a mi madre...
Las morcillas van en un recipiente y las longanizas en otro.
Ingredientes:
2 Kg. de morcillas de cebolla ya oreada.
2 Kg. de longaniza gruesa o chorizos ya oreados.
Aceite de oliva virgen extra.
Elaboración:
Se dejan secar los embutidos antes de freír, para que no revienten al freírlos en el aceite. Se limpian los recipientes bien y se secan.
Se pone un recipiente con aceite a calentar (puede ser una sartén o un cazo) y se van friendo y colocando en el tarro o la orza donde los vayamos a dejar.
En primer lugar las longanizas. En ese mismo aceite podemos freír las morcillas y las colocaremos en otro tarro. No debemos hacerlo al reves porque las morcillas dejarían el sabor en el aceite. Al finalizar desechamos este aceite.
Ponemos aceite limpio a calentar hasta que humee y lo dejamos que se enfríe, se lo añadimos a los tarros hasta cubrir un par de dedos por encima del embutido, cerramos los botes y lo guardamos en la despensa.
Y ya lo tenemos para una temporada...para hacer arroz al horno, para tomar con huevos fritos y patatas o lo que se nos ocurra, todo muy bajo en colesterol.
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